En el lejano año de 1640 una nueva alarma llegó a la ciudad de Mérida. Cerca de 300 corsarios holandeses habían desembarcado en el puerto de Santa María de Sisal. Los caballeros y jóvenes valientes pronto se aprestaron a la plaza principal y se dirigieron a Hunucmá, pueblo vecino entre Sisal y Mérida, donde montaron guardias por 8 días retirando así a los piratas.
La población al saber la noticia de su partida, llevaron presentes a los valientes voluntarios junto con una figura del Apóstol Santiago, por lo que se creó un espacio muy fragante resultado de los cítricos, ofrendas, velas y flores depositadas. Esta vela de cera natural conmemora este valiente hecho que cimentó las bases de lo que sería el fuerte de Santiago, una joya arquitectónica defensiva que sobrevive hasta nuestros días:
En la costa de la península de Yucatán, fragancias de limón, flores de azahar, cedro y rosas de castilla son un sobrio perfume mezclado entre la brisa y el viento que abrazan el antiguo fuerte de Santiago de Sisal, donde celebran un himno de victoria.
En todas nuestras velas utilizamos cera virgen de abejas variedad Apis mellifera obtenida de comunidades rurales del oriente de Yucatán. La mecha es elaborada en algodón 100% puro sin alma de metal por lo que no emana humos nocivos o tóxicos de metales pesados.
Peso/Dimensiones
190 grs /6.7 cm de alto por 5.5. cm de diámetro Tiempo de combustión 18 horas aprox. Pirámide Olfativa Limón, azahar, rosas de castilla y cedro.